EL gobierno autoriza la convocatoria de ayudas a poryectos de I+D+i de la Agencia Estatal de Investigación
El Ejecutivo también aportará más de 15 millones de euros a la Real Academia Española (RAE) para reforzar su liderazgo internacional y científico. Además, ha aprobado contratar un sistema contra drones ilegales en Madrid para garantizar la seguridad de las altas instituciones del Estado.
El Consejo de Ministros ha autorizado a la Agencia Estatal de Investigación la convocatoria de ayudas a los proyectos de I+D+i en las modalidades: 'Generación de Conocimiento' y 'Retos de Investigación', por valor de 362 millones de euros.
La primera se orienta a proyectos de investigación sin orientación temática previamente definida que tienen como objetivo el avance del conocimiento, con independencia del horizonte temporal y del ámbito de aplicación del mismo. La segunda, a la resolución de problemas vinculados a ocho grandes retos de la sociedad incluidos en el Plan Estatal de Investigación Científica y Técnica y de Innovación 2017-2020.
El Ejecutivo también ha autorizado la convocatoria de ayudas para proyectos de 'I+D+i Retos Colaboración', dotada con 260 millones de euros. Estos proyectos movilizan financiación privada, generan empleo y contribuyen al crecimiento económico.
El objetivo de esta medida es facilitar, mediante consorcios público-privados, la incorporación de conocimientos, nuevas tecnologías, productos y servicios para fomentar el desarrollo tecnológico y la innovación en España.
El ministro de Ciencia, Innovación y Universidades en funciones, Pedro Duque, ha destacado que ambas convocatorias son las más importantes para la comunidad científica y favorecen la transferencia de tecnología al tejido productivo. En total, ha indicado, 432 millones se destinarán a inversión en subvenciones y 190 en créditos bonificados para las empresas consorciadas.
Duque ha resaltado el compromiso del Gobierno con los plazos previstos en el calendario que la Agencia Estatal de Investigación puso recientemente a disposición de la comunidad científica española. El objetivo, ha añadido, es que los investigadores se adapten al calendario de forma gradual, puedan elegir el momento en el que comienzan sus proyectos y no tengan periodos sin financiación.