Cursos de la Granda 2021

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Objetivo: Los Fondos Europeos Next Generation, una buena parte de los cuales han sido asignados a España, tienen como propósito una modernización de la economía que se apoye, entre otras metas, sobre el respeto al medioambiente, la transformación digital de las empresas, el refuerzo del sistema sanitario y el estímulo a la modernización de las infraestructuras.

Todo ello exigirá una puesta al día de las empresas españolas y del sistema nacional de innovación que supondrá grandes desafíos y oportunidades como las que se le abren a la industria del automóvil. En todos estos procesos las empresas multinacionales pueden desempeñar un papel central a través de la internacionalización de su I+D, dados los enormes recursos de que disponen para innovar y los contactos privilegiados de sus casas matrices con centros mundiales punteros en ciencia y tecnología. Viceversa, el desarrollo tecnológico puede facilitar la internacionalización de las empresas de economías emergentes o “intermedias”, como es el caso de España. Nuestra visión de la globalización ha cambiado con la crisis de 2008 y, en mayor medida aún con la crisis sanitaria, y ello podría favorecer un proceso de reindustrialización. La pandemia de Covid 19 ha puesto de manifiesto los peligros de las cadenas de valor que nacen a miles de kilómetros de la Unión Europea y la pérdida de soberanía industrial que conllevan, con sus riesgos inherentes en emergencias como las que hemos vivido. Aunque está claro que no es deseable un retorno del viejo proteccionismo, la Comisión Europea plantea la necesidad de cadenas de valor más cortas y territorialmente ancladas. Este objetivo se relaciona con la necesidad de reindustrializar a la Unión Europea. Es evidente que el desmantelamiento de la industria que se da, casi sin excepción, en todos los países de la Unión, y especialmente en el nuestro, está generando una enorme dependencia comercial y tecnológica de dichos proveedores externos y una severísima caída del empleo que, a su vez, ha ido de la mano con la radicalización política a lo largo de todo el continente. Es así que algunos de los proyectos que el Gobierno español y las empresas han presentado a Bruselas se centran en la sustitución de importaciones de productos esenciales, como medicamentos o principios activos respecto a los que Europa actualmente depende de proveedores asiáticos. No obstante, estas cadenas de valor más ancladas pueden proporcionar oportunidades a las empresas españolas sólo en la medida en que éstas sean competitivas, lo que requerirá una actualización de la tecnología y la formación. El curso tiene como objetivo central conocer mejor estos cambios recientes, así como comprender el papel de la internacionalización de la actividad innovadora de las empresas. En particular, se destacará en qué medida las empresas multinacionales influyen sobre la industria española. A partir de este análisis se realizará una reflexión sobre las políticas industriales y tecnológicas más idóneas para hacer frente a los nuevos desafíos.